Te sientas frente a un tablero y repentinamente tu corazón brinca. Tu mano tiembla al tomar una pieza y moverla. Pero lo que el ajedrez te enseña es que tú deber permanecer ahí con calma y pensar si realmente es una buena idea o si hay otras ideas mejores.
Las grandes naciones han actuado siempre como gángster, y las pequeñas como prostitutas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario